Los profesionales sanitarios son un gremio que precisa de una formación continuada.  A pesar de las largas jornadas de trabajo, los complicados turnos y el propio día a día, es necesario que saquen tiempo, muchas veces de donde no hay, para seguir formándose. Esta formación permite ampliar los conocimientos, adquiridos en la carrera y en el desarrollo de su actividad profesional, para mejorar la atención de los ciudadanos en su condición de pacientes, cuidar su salud y ofrecer un mejor servicio.

Los pacientes, eje central del sistema sanitario, exigen, cada vez más, una competencia profesional y un compromiso con la actualización de conocimientos, siempre necesarios para conseguir una medicina personalizada. Por ello, la formación continuada es fundamental en este sector.

Qué aporta la formación continuada a los profesionales sanitarios
Aunque llevarla a cabo puede ser engorroso debido a la falta de tiempo y el estrés del día a día, recibir formación es muy beneficioso para los profesionales sanitarios. Recibir esta formación produce un crecimiento a nivel personal y profesional, aporta conocimientos actualizados sobre nuevos tratamientos, tecnologías…, mejora la calidad de los servicios prestados a los pacientes, controla y aprovecha al máximo los recursos disponibles para los profesionales y permite lograr el dominio de las herramientas de Salud Digital que están transformando la atención en salud en todos sus ámbitos.

¿El farmacéutico también necesita esta formación?
El personal de farmacia no puede ser menos y, como todo profesional sanitario, tiene que recibir formación.

Con el objetivo de ayudar en la búsqueda de recursos optimizados y eficientes y llevar una mejor gestión del negocio, los contenidos de esta formación se compondrán de actualizaciones sobre marketing, informática de gestión, técnicas de venta y gerencia de farmacias.

Pero esto no es suficiente, ya que no podemos olvidarnos de a quién va dirigida la atención del farmacéutico, a los pacientes. La necesidad de mejorar su experiencia hace indispensable una formación en:

· Técnicas de comunicación, con las que aprender a escuchar al cliente y hacerse escuchar por él de una manera eficaz y convincente.

· Orientación al paciente. El farmacéutico es un profesional sanitario muy próximo a los pacientes y que inspira su confianza. La adquisición de conocimientos, que permitan solventar sus dudas sobre las patologías que padecen y los tratamientos que reciben, es muy importante. Además de estar al día de los últimos avances en herramientas digitales que favorecen la monitorización de los ciudadanos en lo referente a su salud.

La formación va más allá, no se queda sólo en los profesionales cuando hablamos de salud
Cuando nos referimos a la formación continuada en salud no podemos hablar exclusivamente de la dedicada a los profesionales sanitarios. Si el paciente no recibe educación sobre salud no vamos a ningún lado. El paciente ya no es un mero espectador en sanidad, es un pilar activo fundamental del sistema sanitario que precisa de información sobre su salud, en general, y su enfermedad, en particular, para conseguir este cambio de rol.

Los pacientes cada vez tienen más hambre de conocimiento, lo que es ayudado por las nuevas tecnologías. Quién no ha buscado en Google cualquier tema relacionado con la salud. Cuando un paciente recibe un diagnóstico y no obtiene la información necesaria por parte de los profesionales sanitarios intenta buscarla por todos los medios, siendo internet un medio rápido, aunque no del todo fiable. Por ello, es fundamental, que todos los profesionales sanitarios que tengamos un contacto directo con los pacientes, pongamos solución a este problema y dediquemos parte de nuestro tiempo a formar a los pacientes en salud.

La revolución digital también afecta a la formación
Una de las excusas que nos ponemos para no realizar esta formación continuada es la falta de tiempo. Pero gracias a cómo la revolución digital está entrando como un torbellino en la formación, queda lejos el tener que disponer de unos días y horarios determinados para realizarla. Las nuevas técnicas formativas permiten que estas puedan realizarse en cualquier lugar y momento del día, lo que facilita este aprendizaje continuo de los profesionales sanitarios.

También quedaron atrás las formaciones presenciales en las que el docente se dedicaba a hablar sin parar sobre el tema a tratar, mientras que el alumno era un mero oyente con un perfil totalmente pasivo. Numerosas técnicas innovadoras están irrumpiendo en este campo para hacer la formación más dinámica y atractiva. Algunos ejemplos son:

· La realidad aumentada, virtual o mixta. Crea lecciones inmersivas que permiten llevar el mundo exterior al aula y la revés. Esta técnica favorece el aprendizaje colaborativo e interactivo

· La inteligencia artificial. La utilización de chatbot para responder a preguntas concretas y facilitar el trabajo de los formadores.

· El autoaprendizaje personalizado. Basado en el aprendizaje blended que implica métodos de basados en el descubrimiento, centrados en los alumnos y autodirigidos.

· El rediseño de los espacios de aprendizaje tanto online como offline, en los que el estudiante, en lugar de leer, crea conocimiento junto con otros compañeros o individualmente.

El papel de las asociaciones de pacientes en la formación
Las asociaciones o fundaciones dedicadas a la atención de los pacientes tenemos un papel relevante en la formación continuada, especialmente la dirigida a los pacientes.

El aumento del conocimiento y el empoderamiento de estos es uno de los objetivos que tenemos la mayoría de estas entidades.

Para ello, es fundamental, realizar actividades de formación que ayuden a alcanzar estos objetivos.

Pero esta labor debería de ir más allá de los pacientes y extenderse a los profesionales sanitarios. El que los profesionales conozcan las necesidades de los pacientes y sus puntos de vista, aprendan de sus experiencias… puede ayudar a mejorar su labor asistencial. Los pacientes, aunque no tienen formación sanitaria, tienen un amplio abanico de conocimientos que compartir y que todo profesional sanitario debería escuchar.

Un ejemplo de proyecto de formación continuada
En la Fundación Lovexair, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la atención de los pacientes respiratorios, vamos más allá. Innovamos en formación en salud digital dirigida tanto a pacientes como a profesionales y creamos proyectos dedicados a ello.

Nuestro nuevo proyecto, #PionerosHappyAir, tiene como objetivo crear una comunidad de pacientes respiratorios empoderados en su enfermedad y en salud digital, todo guiado por profesionales sanitarios especializados en ambos campos. Desde la fundación llevamos a cabo la formación necesaria para que ambos protagonistas del proyecto, pacientes y sanitarios, adquieran los conocimientos necesarios para ser parte del mismo.

Con ello pretendemos aumentar el conocimiento que los pacientes tienen sobre todo lo relacionado con su enfermedad y aprendan cómo la salud digital les ayuda a manejar correctamente su salud.

Además, los profesionales sanitarios aprenden a gestionar la salud de sus pacientes con herramientas innovadoras de salud digital y refuerzan sus conocimientos sobre salud pulmonar.

^{*Si te interesa este proyecto o crees que a tus pacientes les podría interesar, te invitamos a que contactes con nosotros a través del correo cuentanos@lovexair.com o entra en la URL www.happyair.org/pioneros y te explicaremos todos los detalles.}