Transparencia en investigación biomédica genera confianza en la sociedad

30/3/2015
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Transparencia en investigación biomédica genera confianza en la sociedad
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Cada día se publican los resultados de 75 ensayos clínicos y 11 revisiones sistemáticas.

Garantizar la protección de la información genética de las muestras es actualmente uno de los principales retos en materia de ética en investigación biomédica.

Investigadores, clínicos y pacientes han coincidido en señalar que el comportamiento transparente en la investigación biomédica es un elemento imprescindible para generar confianza y mantener la credibilidad ante la sociedad. Así, los expertos reunidos en la mesa de debate 'Ética y transparencia en la investigación biomédica', organizada por la Fundación Lilly y la Real Academia Nacional de Farmacia (RANF), han apostado por buscar criterios comunes que puedan facilitar el flujo de la comunicación científica y que reflejen tanto a investigadores como a pacientes dentro de un marco ético. La publicación de todos los resultados de las investigaciones es una medida de transparencia por la que apuestan todos los expertos.


De izquierda a derecha: Prof. Honorio Bando, consejero del instituto de Salud Carlos III; Dr. Javier Arias, subdirector del Instituto de Salud Carlos III; Dr. Rafael Dal-Ré, Programa BUC (Biociencias UAM+CSIC); Javier Ellena, presidente de la Fundación Lilly; Prof. Mariano Esteban, presidente de la Real Academia Nacional de Farmacia; Óscar Prieto, presidente de ASATE y Dr. José Antonio Sacristán, director de la Fundación Lilly.

Una sociedad que ve los resultados de la investigación como algo transparente estará más dispuesta a favorecer la inversión en esta materia”, ha asegurado el doctor Javier Arias Díaz, subdirector general del Instituto de Salud Carlos III. Para ello apuesta por “tratar con cuidado las comunicaciones sobre hallazgos científicos que se trasladan a la sociedad, para evitar despertar falsas esperanzas que puedan conducir a la frustración y entrañar el riesgo de desembocar en una posterior falta de credibilidad”. Por su parte, el doctor el doctor José Antonio Sacristán, director de la Fundación Lilly, ha coincidido en señalar que la transparencia se está convirtiendo en “un valor fundamental de los sistemas sanitarios”.

Información genética de las muestras
Uno de los temas que se han tratado en la mesa, es la garantía al paciente del uso de las muestras, ya que contienen “información genética que se puede conservar y afectar incluso a la descendencia” ha recordado el doctor Arias, aludiendo a la rápida evolución de la ciencia. En este punto, ha recordado que la bioética occidental “pone por encima el interés del participante en la investigación sobre el interés de la ciencia y la sociedad”.

Publicación de resultados positivos y negativos
Cada día se publican los resultados de 75 ensayos clínicos y 11 revisiones sistemáticas” ha recordado el doctor Rafael Dal-Ré, del programa BUC (Biociencias UAM+CSIC). Sólo en Clinicaltrials.gov, hay cerca de 187.000 estudios registrados de 188 países. “El registro prospectivo de los ensayos clínicos facilitará la difusión completa de los resultados”, añade el doctor Sacristán.

De cara a lograr una comunicación transparente de la investigación biomédica, Dal-Ré ha apuntado la necesidad de superar cinco retos “un acceso accesible y gratuito a los resultados por parte de los pacientes; mayor control de calidad en las revistas científicas; registro y publicación de los ensayos con intervenciones no reguladas como puede ser la fisioterapia o la cirugía; compartir los datos obtenidos debe llegar a ser la norma, y, por último, el profesional sanitario debe concienciarse en registrar antes de su inicio y publicar todos los ensayos clínicos”, resume. Y es que, los datos demuestran que en EE.UU, y en contra de la normativa vigente, a los cinco años de haber terminado los ensayos clínicos con medicamentos, sólo en el 50% se dispone de los resultados.

Además, los expertos han hecho especial hincapié en publicar tanto los resultados positivos como los negativos. “Los ensayos con resultados positivos tienen el triple de posibilidades de publicación que aquéllos con resultado negativo. Sin embargo, ahora con las plataformas de registro, donde se pueden colgar los resultados obtenidos no hay razón alguna para no hacer públicos los resultados de cualquier ensayo clínico”, destaca Dal-Ré.

Por último, el profesor Honorio Bando, Académico correspondiente de la RANF, destaca la importancia de apoyar con proyectos propios los impulsos realizados desde Europa. “Es esencial que entre todos consigamos que la investigación biomédica sea veraz, clara, con gran transparencia y compromiso de servicio para los pacientes, que son los verdaderos sujetos activos y protagonistas de la investigación biomédica”, concluye.

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