Hasta ahora, en el Día de la Publicidad, los publicitarios podían encomendarse a una única figura: San Publicito. Sin embargo, la agencia MK Media creía que los agnósticos del santo estaban desamparados y por eso ha creado una sorprendente alternativa laica: Publia León. Un peculiar personaje al que no puedes pedirle milagros, pero sí toda la motivación necesaria para una carrera publicitaria de éxito.

Desde hace años, el último viernes de enero es el Día de La Publicidad. No tardó en surgir la idea de un patrón al que se bautizó como San Publicito. Más tarde, llegó San Publicita y ahora convivirá con todos ellos una figura menos celestial, pero que tiene los pies bastante más en la tierra: Publia León, la gurú de los escépticos de San Publicito.

No se trata de renegar de la divinidad, sino ofrecer una alternativa más realista dirigida a aquellos profesionales del sector que no crean en espíritus, símbolos y estampitas. El objetivo era que todos aquellos creativos, ejecutivos, planners y estudiantes de publicidad que destaquen por su inconformismo, incredulidad y pragmatismo, tuvieran una patrona que les representara.

Encarnada por la popular headhunter publicitaria Paloma Ocaña, el personaje de Publia León es una coach, líder y guía profesional. Su misión es motivar a los publicitarios para que logren lo que se propongan, como ganar premios, conseguir un ascenso o pasarse a cliente. Peticiones hasta el momento ignoradas irremediablemente por San Publicito.

MK Media, de la mano de la productora Dos35, ha creado seis vídeos repletos de acidez e ironía que pueden verse en la página web publialeon.com. Sin ánimo de evangelizar, sino todo lo contrario, en esta campaña se relatan de forma humorística las peculiaridades y contradicciones del sector.