La región de Afar es una región con un 87% de población rural a la que sequías y hambrunas recurrentes abocan a una pobreza crónica e inseguridad alimentaria constante y donde un 56% de sus habitantes viven en la pobreza absoluta. Los datos de la última Encuesta Demográfica y de Salud de Etiopía de 2016 (EDHS 2016) son muy preocupantes.

Laboratorios Viñas ha colaborado con la ONG Amref Health África en Etiopía en un proyecto que ha beneficiado a 2.150 mujeres y a casi 9.000 niños menores de 5 años, además de informar sobre las medidas de prevención para la COVID19.

El estado regional de Afar (Etiopía) es una región de 1,7 millones de habitantes cuyo 87% vive en el medio rural. Las sequías y las hambrunas recurrentes en la zona derivan en pobreza crónica e inseguridad alimentaria constantes y afectan con severidad a la población. El 56% de los habitantes de la región viven bajo la pobreza absoluta.

El grupo étnico predominante son los Afar (+90 %), una sociedad de pastores nómadas que viven en un entorno desértico, con un clima árido-semiárido. Su economía se basa en el ciclo de lluvia y la búsqueda de agua y pastos para el ganado (base de su alimentación), que también define su estilo de vida y patrón de asentamientos: los hombres se mueven con los rebaños, mientras que las mujeres y los niños mantienen la residencia.

Según el informe de evaluación conjunta Pre Belg / Sugum 2015 en las zonas 1, 3 y 5 de la región de Afar, la sequía ha causado una grave inseguridad alimentaria continua en el hogar y un aumento de los casos de desnutrición en niños menores de 5 años, mujeres embarazadas y lactantes. El agotamiento de las explotaciones ganaderas de los hogares, el aumento del precio de los cereales en mercados y la baja venta debido a las malas condiciones del ganado han agravado el problema. Persiste la escasez de agua en las tierras bajas agravadas por la alteración del patrón de lluvias y los conflictos obligan a desplazamientos continuados en las zonas altas con riesgo a sufrir enfermedades e inseguridad alimentaria.

El estado de salud general de la población de Afar muestra altos índices de precariedad, de los más bajos del país, especialmente entre mujeres y niños, a pesar de la mejora de los últimos años. La última Encuesta Demográfica y de Salud de Etiopía de 2016 (EDHS 2016) arroja datos muy preocupantes entre los que destacan: el 38% de los niños menores de 5 años tienen retraso en el crecimiento y el 24% tienen un peso inferior al estándar para su edad; solo el 7% de los niños de 6 a 23 meses gozan de los estándares dietéticos mínimos aceptables y solo el 14% de los niños disfrutan de una dieta adecuadamente diversa; el 57% de los niños de 6 a 59 meses de edad y el 24% de las mujeres en edad reproductiva padecen anemia; y el 22% de las mujeres entre 15-49 años tienen un peso inferior a los mínimos estándares (IMC inferior a 18.5).

Durante el período de 5 años que precede a la EDHS 2016, la tasa de mortalidad en Etiopía se resume en que 1 de cada 15 niños en Etiopía muere antes de llegar a los 5 años y 7 de cada 10 muertes ocurren durante la infancia. Las regiones muestran grandes variaciones en mortalidad infantil y mientras en la capital Addis Abeba es de 39 muertes por 1.000 nacimientos vivos en la región de Afar alcanza las 125 muertes.

Las mujeres de Afar tienen un estatus especialmente bajo y soportan todas sus consecuencias: trabajos pesados, riesgos severos durante el embarazo/parto e incapaces de controlar prácticas sexuales seguras con sus compañeros, una altísima prevalencia de mutilación genital femenina (91% cuyo 64% padecen la más severa, la infibulación) con la consecuente violación de derechos de mujeres y niñas, zona con la cobertura de parto institucional más bajo del país (15%).

El sistema de salud público todavía es débil y las comunidades no acuden a centros médicos, bien por falta de información o porque no confían en los servicios prestados, a pesar de todos los esfuerzos realizados.

Una intervención con un objetivo concreto
Aunque la situación sanitaria presenta muchos frentes, Amref Salud África y Laboratorios Viñas han definido un objetivo concreto para la intervención desarrollada el pasado año con el fin de empezar a mejorar la situación sanitaria en 3 de los distritos más afectados de Afar: un distrito de la Zona 1 (Asayita) y dos distritos de la Zona 5 (Dewe y Telalak). Estas son las zonas donde se encuentran los hogares más vulnerables y con mayor inseguridad alimentaria crónica.

- Reducir la mortalidad atribuida a la malnutrición y a la escasa utilización del sistema público de salud en menores de 5 años y mujeres embarazadas de Afar.

Esta actuación se ha desarrollado durante 6 meses a lo largo de 2020 y ha contribuido a fortalecer los servicios de salud materna infantil prestados por el sistema público de salud y a mejorar las capacidades comunitarias contra la desnutrición, gracias a la puesta en marcha de dos tipos de actividades:

a) Campañas de salud materno-infantil in situ, donde se han realizado exámenes médicos de detección y tratamiento de desnutrición, vacunaciones y revisiones médicas a los niños y mujeres embarazadas y lactantes.

b) Charlas informativas para mujeres embarazadas, en las que se ha proporcionado información y recomendaciones durante el embarazo, parto y puerperio y en las que se ha transmitido información sobre medidas nutricionales esenciales y lactancia materna.

Mayor alcance del proyecto, más beneficiados
Gracias al apoyo de Laboratorios Viñas, el proyecto ha alcanzado directamente a:

- 2.150 mujeres en edad reproductiva, que se han beneficiado de una revisión médica
general, incluido estado nutricional;

- 8.897 menores de cinco años, que se han beneficiado de una revisión médica general, incluido estado nutricional.

Además, este proyecto ha servido para informar sobre las medidas de prevención de la propagación de laCovid-19. Las comunidades de 12 aldeas remotas en Afar han sido sensibilizadas sobre medidas para la prevención de la Covid-19.

Desde 2007, Laboratorios Viñas apoya intervenciones humanitarias para ayudar a paliar la crítica situación sanitaria y alimentaria de muchas personas en distintas partes del mundo. Esta acción forma parte de su política de Responsabilidad Social Corporativa.