Un total de 1.600 farmacias se han sumado a la campaña impulsada por el Consejo de Colegios Profesionales de Farmacéuticos de Castilla y León (Concyl) que busca reforzar la información dirigida a los cuidadores sobre los fármacos pediátricos.

Cuando los padres o cuidadores acudan a la farmacia a por un medicamento para un menor, ya sea antibióticos, antipiréticos (indicados para la fiebre) o antitusivos (para la tos), el farmacéutico informará sobre su uso correcto, haciendo hincapié en su indicación y posología.

Además, para que el medicamento se pueda identificar en casa de forma clara, el farmacéutico le colocará un adhesivo alusivo al tipo de fármaco que es.

Los adhesivos azules identificarán los antibióticos, los rojos se colocarán en los antipiréticos y los adhesivos verdes se incorporarán en los fármacos para la tos.

Esta campaña nació en la provincia de Palencia de la mano de su Colegio Oficial de Farmacéuticos y por su impacto sanitario sobre la población infantil de esta comunidad, el Concyl ha apostado por su desarrollo desde todas las farmacias de la Comunidad.

“En la población pediátrica, las dosis tienen que ser muy precisas porque las intoxicaciones se pueden dar en mayor medida por lo que en las oficinas de farmacia no se puede dar nada por sabido” y a la dispensación le tiene que acompañar una explicación “clara” sobre la indicación del fármaco y un recordatorio de cuál es la dosis correcta, ha aseverado la vocal de la Oficina de Farmacéuticos de Palencia, Ana Deza.