El test de la AMH facilita a los médicos información sobre la fertilidad de la mujer, y sobre en qué momento dejará de poder concebir por sus propios medios.

El pasado jueves, 10 de noviembre, la compañía de innovación biomédica Beckman Coulter organizó un workshop en Málaga para tratar sobre cómo el análisis de la AMH (Hormona Antimulleriana) ayuda determinar la fertilidad de una mujer. Este test aporta una información válida a los médicos para saber cómo enfocar los problemas de concepción en mujeres, y poder así asesorar y dirigir correctamente el tratamiento más adecuado para cada caso.

Se ha demostrado que la información que se extrae de la hormona AMH correlaciona perfectamente con la reserva ovárica. La reserva ovárica es un indicador de la probabilidad de concepción de una mujer, que va disminuyendo entre los 20 y los 45 años. Así, Enrique Oquiñena, experto en análisis clínicos y ponente en esta jornada añade: “Gracias a los datos de la reserva ovárica, se detecta el momento en el que la paciente se quedará sin óvulos, y por lo tanto, cuándo dejará de poder concebir por sus propios medios, una información clave en la actualidad”; además, continúa diciendo: “España es uno de los países en los que más tarde se quedan embarazadas las mujeres y en el que menos cantidad de hijos tienen, lo que conlleva a mayores dificultades para concebir y a problemas regeneracionales en nuestra población; por eso, esta nueva metodología es un gran avance para el mundo de la fertilidad, permitiendo ajustar los tratamientos idóneos especificados para cada persona a través de unos datos clave que ayudarán a lograr el embarazo deseado”.

Por su parte, José María Vales Giribes, product manager de Beckman Coulter apunta: “la información que aporta la AMH es el primer dato que dará pistas a su doctor/a sobre si la paciente está en condiciones de concebir o no, valiéndose como punto de partida para llevar a cabo un seguimiento u otro, siempre personalizado”.

Por otro lado, el resto de metodologías requieren de mayor tiempo con una instrumentación compleja y son utilizadas manualmente; en cambio, el test de la AMH está automatizado gracias a la tecnología de Beckman Coulter, lo que se traduce en fiabilidad, rapidez y garantía. Una vez los laboratorios tienen la muestra, la pueden procesar de una forma segura y reproducible, y enviar los resultados en 24 horas a la clínica de fertilidad solicitante.

Así, España ya cuenta con aproximadamente 120 laboratorios capaces de realizar el test de la AMH y facilitar esta valiosa información a los médicos para que puedan tratar de la forma más efectiva a cada paciente.